sábado, 31 de julio de 2010

Y la propia naturaleza nos castigó...

Las secuelas del temporal de lluvia.

Las lluvias arruinan al campo

El diluvio destroza cosechas casi sin excepción y las pérdidas ya se prevén millonarias.El impacto en los cultivos y en las labores de labranza es el peor de los últimos años.


RD Nicen que el agua destroza los caminos y, en Asturias, no lo había hecho hasta ahora con tantísimo alcance. El campo asturiano vive uno de sus peores momentos, si no el peor, de los últimos años y aún queda diluvio por delante. Las pérdidas para la agricultura y la ganadería ya se prevén millonarias llueva más o no. Los cultivos de hortalizas, frutas y legumbres se han echado a perder o está por ver cómo han aguantado las trombas de agua y los animales ya empiezan a resentir su salud ante la humedad continua. La peor parte se la llevan las zonas del occidente y la costa, pero los praos de las vegas y cercanos a los ríos son auténticas lagunas.

RLa encrucijada de los productores de faba N
El daño ha sido terrible en las plantaciones de zonas bajas. Hectáreas de fabas que llevaban un mes sembradas, a falta de colocar tan sólo las cuerdas, y que ahora son gigantescas charcas. El presidente del Consejo Regulador de la Faba Asturiana, José Antonio Iglesias, explica que los grandes productores, mientras esperan que pare de llover, se deciden entre volver a sembrar o no. Y, de hacerlo de nuevo, tendrían que esperar al menos 15 días a que seque el terreno desde que pare de llover, con lo que se alcanzaría julio y la recolecta se pospondría a un mes fatídico para la tarea por su condición de lluvioso y frío, como es diciembre.
"El problema con lo que está sembrado es que se pudre la raíz y el tallo al estar tanto tiempo en agua", indica Iglesias, que explica que las lluvias que hace dos años asolaban el campo asturiano en mayo dejaron para tirar entre el 30 y el 40% de la cosecha. Ahora el problema es mucho peor. "Las zonas bajas están afectadas casi todas. Es un desastre. Hay productores que se plantean resembrar, otros no y los hay que las tienen de hace una semana, y esa faba ya no sale o se pudre", explica Iglesias. Angel García, que tiene su plantación en seis hectáreas en Arbón (Villayón), tiene al menos la mitad completamente perdidas. "Y debajo del agua", matiza, puesto que la imagen es la de un gran embalse. "Planté hace un mes y, hasta que empezó a llover, estaba seco, casi había hasta sequía", lamenta, calculando que ha perdido más de 3.000 kilogramos de cosecha y, en el resto de hectáreas, "habrá que ver cómo va, porque tendrán más problemas de hongos pese a estar en pendiente". Lleva diez años dedicándose a la producción de faba, aunque "siempre hubo fabes en casa", y dice que nunca había visto tal cantidad de agua: "Te planteas no volver a sembrarlas porque diciembre es un mes malo y ya tienes las pérdidas del trabajo, de la instalación y de la semilla. Si siembro otra vez tendré el doble de pérdidas".

RProblemas para todo el año en las pomaradas N
Desde la Agrupación Asturiana de Cosecheros de Manzano de Sidra (Aacomasi) ya advierten de que los daños, ante las inundaciones de pomaradas, se verán durante todo este año. Y las consecuencias vendrán en forma de problemas fitosanitarios ante la podredumbre de las raíces de los manzanos, por la asfixia a las que la somete el agua y que acabarán derivando en árboles secos. También recuerdan que hace dos años ocurrió lo mismo y las pérdidas incluso podrían ser de hasta un 50% de manzana menos. Y, como en el caso de la faba, las peores imágenes se concentran en las zonas bajas.

RPérdidas generalizadas en todos los cultivos N
El presidente de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), Ramón Artime, explica que los daños llegan a todo tipo de plantaciones y que, sobre todo, es el occidente asturiano el que más concentra. "Está todo perdido, maíz, patatas, fabes... Se anegó todo y hay muchas siembras arrastradas por el agua", indica. Pero aún es pronto para valorar las pérdidas. "Vamos a esperar unos días, pero es un desastre total", añade Artime, que ya augura que habrá que recurrir a la Consejería de Medio Rural ante semejantes secuelas. También el recién elegido secretario general de la Unión de Campesinos Asturianos (UCA), Joaquín López, asegura que, al menos en las zonas bajas, ha visto completos desastres. "Van por delante las vidas que se ha llevado el temporal, pero económicamente hay zonas muy afectadas", dice.
Las soluciones serán difíciles ante el daño generalizado en todos los cultivos. "Hay zonas en las que es más grave, pero le ha venido mal a todo el sector. Ha sido un invierno duro, llegaron 15 días de calor y salió todo el campo y las cosechas, pero cuando estaban altas y no demasiado consistentes, ha caído este temporal y es difícil de recuperar. La cantidad de terreno fértil que se ha ido al mar es tremendo", explica López, que calcula que los técnicos tendrán que valorar con tiempo los daños: "Lo primero es lo primero y ahora se tendrán que destinar fondos a las familias que lo han perdido todo, pero luego habrá que paliar los efectos".

RDaños que deberán evaluarse con el tiempo N
El gerente de la Asociación Asturiana de Profesionales del Kiwi, Ignacio Cavanilles, asegura que aún se están evaluando los daños. Las lluvias de hace dos años dejaban a la mitad la producción de kiwis, cuyas plantaciones se reparten por toda Asturias. Y también en el Consejo de la Producción Agraria Ecológica del Principado de Asturias (Copae), su presidente, Javier Aguilar, dice que habrá que esperar a ver cómo le ha afectado esta lluvia al kiwi, en plena floración. Aún así, asegura que, de momento, no ha visto problemas, "hacía falta agua y a mí me ha venido bien, aunque veremos más adelante cuando empiece a engordar".

RRebrote de mamitis en las vacas lecheras N
La lluvia también ha paralizado toda actividad agraria. La secretaria general de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) de Asturias, Mercedes Cruzado, indica que el desastre es absoluto en las zonas de ribera y costa. "Ya se estaba ensilando la hierba y todo esto la estropea. Cuando se pueda volver con la maquinaria, se habrá perdido el forraje", indica, "no recuerda nadie que haya caído tanta lluvia junta".
Y también afecta a la salud de los animales, puesto que ya se está detectando un rebrote de mamitis debido a las humedades de la tierra. "Se multiplican por mucho por la humedad tan grande y hace estragos en la producción de leche", reitera Cruzado, que explica que ya es tarde para meter a las vacas en los estables, acostumbradas como están al exterior. "Llevamos mucho tiempo sin margen ninguno en las explotaciones y nos apoyamos en lo que cosechamos nosotros, pero ahora se estropea el forraje y también luego lo hará la pación. Es prácticamente inviable que las ganaderías puedan surtirse de productos de fuera ante este panorama", concluye Cruzado.

RLas uvas blancas de
Cangas no resisten el agua N
El presidente de la Asociación Vino de la Tierra de Cangas, Angel Barredo, también habla de desastre, aunque no tanto como en otros sectores. "Nos perjudicó bastante, pero no por inundaciones, que no tuvimos, sino por el exceso de lluvia, que a ciertas variedades como las blancas, que están en plena floración, les perjudica al buen cuajado de la flor", explica. En las pintas confían en que, al no haber florecido aún, se hayan salvado: "La vid lo que quiere en julio es un buen verano".